2007-capitulo-11

Capítulo 11: Escándalo en la estación

Era de mañana y nosotros nos hallábamos esperando al grupo de Darian en la estación. Habíamos llegado temprano, esto con el fin de poder hacer un seguimiento a los pasajeros que iban a ir con nosotros en el tren, después de todo, no queríamos que se volviera a repetir el último incidente.

Lo que no esperaba es que Kai estuviera muy activa, después de todo casi muero la última vez que vinimos. Ahora no puede dejar de mirar cualquier cosa sospechosa que pase cerca de nosotros. Si no fuera porque los guardias la conocían desde antes, ya se la hubiesen llevado para interrogarla por espionaje.

Saque mi libreta para dibujar un rato el paisaje del lugar. A pesar de que este estuviera desgastado y lleno de óxido por todas partes, no podía dejar en pesar que era hermoso a su manera. Siempre se me ha dificultado poder expresarme correctamente, pero si tuviera que resumir por qué, solamente diría; me gusta ver como cualquier cosa en el mundo conserva ese factor “humano” del que nadie escapa. Todos nacemos y todos morimos, sin importar que seas un objeto, una persona o un dios.

  • (¿De verdad acabo de tener un momento filosófico por dibujar una vieja estación de tren?) -Pensé en ese instante para acto seguido rayar todo el dibujo y pasar a las páginas donde tenía mis fórmulas químicas-
  • ¡Oye! Me estaba gustando como iba quedando, estabas captando lo de deprimente que es este lugar -Dice alguien detrás mi el cual podía reconocer por su voz-
  • -Dejo caer mi cabeza hacia atrás parar mirar fijamente a Darian mientras soltaba una expresión sarcástica en mi rostro- Mira quien llego, ¿Es un superpoder tuyo el llegar siempre puntual? Y bueno… Solo lo hacía porque me resulta un poco nostálgico como era este sitio hace unos años.

Esta estación fue la primera de todo el continente, por lo mismo, en su tiempo fue considerada como un monumento al progreso y la unión de las demás naciones. Sin embargo, con el tiempo se fue descuidando debido a que todos los países se amurallaban y se encerraba unos de otros, por lo cual, el gobierno perdió el interés de mantener aquel símbolo de grandeza y solo se concentró en mantener el servicio de transporte. ¿De qué sirve tener un símbolo si a nadie le importa?

Antes de que Darian pudiera sentarse a mi lado, de la nada, una katana se estrella con fuerza contra la banca para luego voltear y darme cuenta de que había sido Kai quien la había lanzado. Me levanto todo nervioso para reclamarle el porqué de su accionar.

  • ¡¿Acaso quieres matarme?! -Le pregunté rabiosamente mientras le volvía a lanzar mi arma- ¿No puedes ver que solo es Darian?
  • Esta atrapaba mi arma en el aire para apuntar hacia Darian sin temblarle el pulso- ¿No se te ocurrió pensar que puede ser un inhumano? Y… ¡Deja de lanzarme tu arma! ¿Sabes lo peligros que puede ser? ¡Un día de estos le sacaras un ojo a alguien!
  • Oigan creo que estamos haciendo demasiado escandalo para lo temprano que es… -Decía Darian mientras trataba de calmar la situación-
  • Tú cállate -Responde Kai para luego tirar del martillo de mí revolver- Si no te identificas juro que disparare.

Darian alza rápidamente sus brazos para evitar que su contraria disparara. Trato de acercarme lentamente a Kai para calmarla un poco, de seguro ella aún se siente culpable de lo que paso la última vez, los nervios no la deben dejar entrar en razón. Los guardias de la estación se habían puesto en alerta y ya estaban rodeándonos, un paso en falso y esta bomba de relojería estallará.

Antes de que pudiera decir algo, dos soldados vestidos de negro, con tapabocas del mismo color y con equipamiento especial por todo su cuerpo se posan en el espaldar de Kai, estos le apuntaban con carabinas modificadas de la SD. Viendo cómo es su ropa y sus armas no cabe duda que eran parte del cuerpo de elite de la SD.

No sé cómo de un simple saludo la situación escalo a incluir a los soldados más fuertes del país, ¿Acaso había llegado a la estación alguien de alto rango de la central? O ¿Estaban escoltando a alguien importante de otro país? Él porque era lo de menos, mi objetivo ahora es tranquilizar a mi compañera.

  • Baja el arma chica de Hokori, es mejor que recurrir a matarte -Le decía a Kai uno de los soldados a su espalda- Todo lo que le haga al joven Darian se lo devolveremos elevado por diez.
  • Por como lo dictan las leyes internacionales, tienes catorce segundos para bajar tu arma, si no procederemos a dispararte -Hablaba el otro soldado para acto seguido comenzar la cuenta regresiva-

Mientras pasaba todo esto, podía ver a un lado mío un farol con un reloj en el cual se veía como las manecillas de los segundos pasaban con gran rapidez. Lo más probable es que a Kai no le quede más de seis segundos antes que disparen, y como si mis piernas tomasen vida propia, me desplazo hasta su espalda para estirar mis manos y gritar.

  • ¡No disparen, mi compañera solo está reaccionando así porque Darian le coqueteo sabiendo de que ella gusta de…! -De la nada recibo un golpe en mi nuca-
  • -Kai se coloca encima mía para seguirme golpeando con el mango de su arma- ¡¿Por qué dices esas cosas, acaso estas borracho o drogado?! ¡Cuando regresemos de la misión te juro que te encadenare en un tren directo a tu puta…!
  • ¡Ustedes son el colmo, por eso nadie quiere hacer una misión con ustedes! Después de esto ni se te ocurra que volveré hacer una misión contigo Roy -Responde Darian fumando uno de sus cigarrillos para poder calmarse también-

Al final se pudo controlar la situación y nadie salió herido, excepto yo que recibí cientos de golpes de Kai, esta misma le explica a Darian el porqué de su accionar, después de todo aun somos muy jóvenes para ir por el camino que vamos y un simple error lo pagaríamos con nuestras vidas. Kai ya lo ha pagado de hecho, siempre olvido que lleva esa mascara en su espaldar.

Los soldados elite de la SD que estaban defendiendo a Darian eran sus guardaespaldas, ósea nuestros compañeros en esta misión. Ellos también se disculparon con nosotros por su accionar tan rígido, debido a su rango deben seguir las leyes internacionales al pie de la letra y no titubear al momento de proteger a su encomendado.

En el instante que se disculparon, engancharon sus armas en sus espaldas para acto seguido hacer una reverencia y dar pie a presentarse cada uno de ellos.

  • Jerry Johnson, #114 del cuerpo de elite de la SD. Mi especialidad es el combate a corta distancia a pesar de que lleve una carabina como arma, eso me hace un artista al momento de moverme en espacios cerrados -Este desprende una gran sonrisa mientras nos da la mano-
  • Candy Brown, #108 del cuerpo de elite de la SD. Mi especialidad es el sigilo y franquear a larga distancia, como pueden ver mi arma lleva un silenciador especializado para confundir el lugar de mi ubicación al enemigo. Además, como pueden ver por mi número, soy mucho más eficiente en las misiones que mi compañero, un gusto conocerlos -Nos da la mano, pero esta no abandona su inexpresividad sin importar nada-
  • ¡Oye CB! -Reclama su compañero mientras la sostiene de los hombros y la agita repetidamente- ¡¿Por qué siempre tienes que hacer lo mismo?! Solo estás seis puestos sobre mí, además ya deja de saludarla a la gente tan fríamente, por lo menos fuerza una sonrisa o algo.
  • Pero así nos enseñaron en la academia, tú eres el único que se comporta como adolecente, por cierto, no dijiste “un gusto en conocerlos” Si haces eso con alguien importante te pueden bajar de rango -Aún no abandona su inexpresividad-
  • … (No nos consideran importantes…) -Pensamos Kai y yo al mismo tiempo-
  • -Darian se acerca furioso a todos nosotros para darnos un golpe en la cabeza- Ustedes si hacen mucho ruido a tempranas horas del día… Mejor subámonos antes que de verdad no nos dejen montar el tren -Se va hasta su vago mientras se queja de su rango actual-

No me podía creer que mi mejor amigo también pasase situaciones similares a las mías con sus guardaespaldas, a la final no somos únicos en la SD, aunque no sabría decir si eso era bueno para nosotros y malo para la sede o viceversa.

En poco tiempo el tren abandono la estación y tomo rumbo hacia Pereyti, el país más salvaje del continente, pero no el mal sentido, cuando nos referimos a su temperamento son muy dóciles y alegres por su parte, el problema es cuando se fijan en un objetivo o una meta, y es mucho peor cuando todos se ponen de acuerdo para cumplirlo. Literalmente morirían por ello.

Recientemente están sufriendo una guerra civil la cual estallo desde que cortaron los intercambios comerciales con casi todos los países, esto con el fin de evitar infiltraciones de espías y poder seguir con sus investigaciones poco éticas sobre los inhumanos. Hasta cierto punto podría pensar que son peores que los laboratorios secretos de Hokori.

Aun así, no puedo ocultar el hecho de que por esos lugares los últimos años hemos descubierto más cosas sobre los inhumanos que cientos de años sobreviviendo a ellos con lanzas y espadas. Tristemente lo único que puedo hacer ante esta situación es agachar la cabeza aceptar que sin ellos más gente moriría hoy en día.

Justificarlos me hace revolver mi estómago, lo único que quiero hacer es vomitar esperando que todos estos pensamientos de la nada desaparezcan, pero de la nada al alzar mi mirada, puedo ver como todos en la cabina me están mirando extrañados por mi cara llena de nauseas. Darian y sus compañeros deben pensar que sufro mareos o algo parecido, sin embargo, Kai sabe perfectamente que es lo que me pasa.

Ella que estaba sentada a mi lado coloca su mano sobre mi hombro para acto seguido regalarme una sonrisa.

  • Oye matasanos, ¿Qué tal si comemos algo apenas que lleguemos? De seguro la comida te sentara bien.
  • -Mientras suelto una leve risa procedo a responderle- Como que eres muy chistosa en decir eso, sabes perfectamente que hay problemas de comida en Pereyti.
  • Jejeje, lo se idiota, mi objetivo era cambiarte el ánimo y hacer que olvidaras todos esos malos pensamientos, ahora tenemos que concéntranos en cubrir un gordo político que seguro come cuatro veces al día.
  • -De la nada responde Darian- De hecho, es un joven recién graduado de su universidad que, igual que su gente, como mucho come dos veces al día… Ah y como dato sin importancia, es el único opositor al gobierno actual de Pereyti.
  • Espera, -Kai pregunta toda extrañada– ¿Cómo un pobre, y no estoy discriminando, puede pagar el servicio de protección de la SD? Sin mencionar que somos un grupo de cinco, con dos elites, un médico y un inspector.
  • Pues simple, este servicio viene es pagado por parte de la casa mi estimada amiga que casi me mata esta mañana -Responde Darian despreocupado como si conociese el porqué de toda la situación-
  • ¿Qué nos oculta la SD? -Le pregunto a mi contrario directamente-
  • Pues resumiendo la historia, este joven político es el gallo de la SD para que Pereyti vuelve abrirse a los demás países. De nosotros depende el futuro de un país… ¡Así que si vuelven a comportarse como niños los amarro al primer poste que vea en la calle grupo de infantiles!
  • Pero señor, yo no me comportado como una niña -Responde Candy, aún manteniendo su inexpresividad-
  • ¡En tu caso es porque eres exageradamente inexpresiva, sonríe un poco por el amor de Dios!

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Notas del escritor: ¡Hola a todos! (Si es que aún hay alguien que lee esto…) Fue un hiatus muy largo debido a que tenía que cumplir con la universidad. Ahora en vacaciones puedo escribir sin preocupaciones, pero no prometo una constancia, de todos modos, muchas gracias a Clancey por no poner esta novela en abandono a pesar de los meses en pausa y también a AsherSworn la cual me ayudara en la corrección de los capítulos de ahora en adelante (Ahora ya no faltaran comillas) Sin más nada que decir, espero que sigan disfrutando de mi contenido y de Stick Horse.

 

Los quiero mucho <3